Sin comunicación no hay relación

Escucha el siguiente audio atentamente:

¿Lo has entendido?

¿No?

Pues lo mismo le ocurre a tu perro cuando las personas hablan y hablan a su alrededor sin parar y esperan que responda en consecuencia.

No hablamos el mismo idioma

Los perros comunican emociones e intenciones constantemente, y lo hacen mediante el lenguaje.

Pero la verdad es que la mayor parte de ese lenguaje no  está basado en sonidos, sino en expresiones corporales.

Y para poder establecer una relación sana y equilibrada con tu perro, tienes que fijarte bien y entender lo que quiere decir. Y responder en consecuencia.

Porque cuando convivimos con alguien, uno de los puntos básicos para que la relación funcione es que haya una buena comunicación.

Si pretendes que el otro te entienda pero no te esfuerzas en escuchar lo que tiene que decir, el fracaso está asegurado.

¿Y entonces por qué tantos y tantos dueños hablan y hablan constantemente con sus perros confiando en que ellos les entienden, y no escuchan absolutamente nada de lo que sus amigos dicen?.

Una de las principales razones es el desconocimiento.

Simplemente no saben interpretar las señales, no se fijan o las entienden incorrectamente.

Otra razón es que sobrestimamos las capacidades de nuestros amigos.

O sea, que pensamos que son muy listos.

Tan listos que ya entienden a los humanos en cuanto llegan a casa (hablen el idioma que hablen), y por lo tanto no es necesario que los humanos aprendamos a entender el “idioma perro”.

Deja de hablar y empieza a escuchar

Y entonces la relación fracasa. Se llena de rencor  y decepciones.

Tu perro te entiende porque se lo has explicado unas cuantas veces, y sin embargo se sigue portando mal.

Pero su cara deja muy claro que te entiende.

Es solo que no quiere portarse bien.

Este es el primer puente que hay que cruzar cuando quieres reconducir la relación con tu perro.

Antes que averiguar qué hacer para que no tire, cómo evitar que ladre a todos los perros que se encuentra, o qué manejo hay que darle para que no destroce objetos cuando se queda solo, tienes que entender lo que comunica tu perro.

Y dejar de escuchar tu propia voz para escucharle a él. Habla menos y presta más atención.

Y como entiendo que esto es fácil decirlo pero no tanto hacerlo, vamos a empezar a practicar.

Voy a publicar una serie de post breves con imágenes de perros “hablando”.

Y quiero que te fijes, que observes y que aprendas a comprender qué es lo que está comunicando ese perro.

De entrada, lo que suelen comunicar los perros son sus emociones en ese momento y en ese contexto. Por lo tanto el contexto es importante.

Si entiendes lo que comunica tu perro en cada momento, y te das cuenta de que se está expresando y diciéndole al mundo cómo se siente, abrirás un nuevo camino en tu relación.

Y lo más importante.

Da igual que no te guste el contenido del mensaje: debes dejar a tu perro que exprese cómo se siente.

Y si lo crees necesario, hacer algo al respecto para que deje de sentirse así.

Evita dirigir todos tus esfuerzos a interrumpir el mensaje o hacer callar al mensajero.

Y canaliza toda tu energía en lograr que tu perro se sienta más relajado y tranquilo: el mensaje cambiará a mejor.

Vamos con el primero. ¿Qué ves aquí?. ¿Qué emoción o intención crees que comunica el perro de este vídeo?.

El contexto es muy conocido para muchos dueños: el humano llega a casa y encuentra algún destrozo.

A continuación persigue a su perro por la vivienda mostrando el destrozo y gritando, ¡¿qué hiciste, eh?, ¿qué hiciste?! 

En  el siguiente post te doy la respuesta.

Pero te aviso desde ya que si has dicho “culpabilidad”, tienes mucho aprendizaje por delante, 🙂