Probablemente la mayoría se equivoca

 

Me gusta ir a eventos donde participan perros.

Puedes conocer a gente muy interesante en ellos.

También conoces a gentuza, claro.

Pero eso pasa en cualquier circunstancia de la vida, es inevitable.

Eso sí, como ya somos mayorcitos y podemos elegir con quién nos juntamos y con quién no queremos tener nada que ver, pues con alejarte de la gentuza, asunto resuelto.

En uno de estos eventos, una competición de perros de trineo (sobre tierra), en la que por cierto participé, conocí a un chico que tenía un tiro de perros groenlandeses.

Nadie más en España tenía un tiro de groenlandeses.

Seguramente ahora nadie lo tenga.

Ahora las carreras son eso, carreras, hay que correr un huevo y llegar el primero o no merece la pena participar.

Y los groenlandeses no corren mucho, la verdad.

Bueno.

El caso es que me interesaba mucho ese tiro y lo que el chico me contaba.

Una de las cuestiones que me explicó es el problema tan enorme que tuvo con ellos el primer año de vida.

Con la comida.

Resulta que cualquier pienso que les daba producía diarreas.

A ver, que los perros se veían contentos y tenían apetito.

Pero es que parecían fuentes, los pobres.

Él cambiaba de una marca a otra, de un tipo de pienso a otro, y nada, los perros siempre con cagalera.

Y conforme pasaban los meses, esto pasaba factura.

Perros flacos, con mal aspecto, descuidados.

Como si no les estuviesen atendiendo correctamente.

Pero él si les cuidaba, y se preocupaba mucho por ellos.

Consultó con unos cuantos veterinarios y otros profesionales.

Y nada de lo que aplicó le funcionó.

Los perros tenían ya 10 meses y daban pena.

Además, aunque era secundario, te digo yo lo que puede tirar un perro de trineo si apenas tiene para crecer.

Y si tiene que parar cada poco para hacer caca.

Así que al final el chico pensó “a la mierda, de perdidos al río. ¿Qué es lo que comen estos perros en Groenlandia? Pienso no, desde luego

Se fue directo a la causa en lugar de concentrarse en el síntoma.

Y les preparó una perola de pollo troceado, pescado y no sé qué cosas más por el estilo.

Y ni él mismo se lo creía, pero los perros empezaron a hacer cacas normales.

Luego empezaron a ganar peso.

Luego parecía que hasta crecían lo que no habían crecido los meses anteriores.

Después sacaron un montón de pelo esponjoso y denso.

Y al final, en apenas 3 meses, parecía que había cambiado de perros.

Así que siguió por ahí, continuó alimentando a sus perros con lo más parecido que pudo dar a lo que se les daría si estuviesen en Groenlandia.

(Más que nada porque la base era pollo y no creo que haya pollos en Groenlandia. Pero la carne de foca por aquí no es fácil de encontrar)

Me impactó mucho esto que me contó.

Por un lado veía a sus perros y estaban estupendos.

Por otro, todos mis conocimientos, todo mi entorno, toda mi educación universitaria decían que eso no se podía hacer, que era pecado mortal.

Así que mandé callar a la vocecita marimandona que todo lo juzga que llevo dentro, y le felicité.

Por atreverse a llevarle la contraria a todo su entorno.

(En lugar de resignarse y seguir por el camino que le marcaban)

 Y por conseguirlo.

Esta anécdota, ahora que la información dietética sobre perros es tan abundante y que la dieta cruda es tan popular puede dejarte indiferente.

Pero es que es de hace 20 años.

Y da una visión interesante: lo mismo hacer lo que todos te dicen que hay que hacer no es buena idea.

Sobre todo si ves que no funciona.

Especialmente si te notas tremendamente incómoda cuando lo haces.

En particular si sientes que aumenta tu frustración y ansiedad cuando estás con tu perro haciendo lo que sea que te han dicho que tienes que hacer.

Hay que ser valiente para hacer algo diferente.

Y más valiente aun para hacer lo contrario de lo que te dicta tu entorno.

Incluyendo muchos profesionales.

Pero los grandes cambios se consiguen así.

No con trucos.

No de un día  para otro.

Sino dándose cuenta de que hay que cambiar el modo de ver la situación.

Y el modo de manejarla.

Si lo que te han dicho o lo que te meten con calzador desde tu entorno solo te genera más problemas en lugar de hacerte sentir mejor, lo mismo deberías plantearte hacer algo radicalmente diferente.

Tengo un servicio de asesoramiento que va en sentido contrario a mucho de lo que te han contado.

Y a mucho de lo que has probado.

O quizá a todo, no sé en qué punto estás ahora.

Pero sobre todo está pensando para ayudar al perro.

No para hacer que se porte bien.

No.

Para ayudarle.

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