Igual estás más que harta de escuchar los consejos de parque de los Tontos Alfa sobre lo mal que estás educando a tu perro

Pero no sabes cómo hacerles callar y te hacen sentir muy insegura.

Y es que convivir con un perro no es tan fácil como habías imaginado, ¿verdad?

El amor es poderoso, pero no es suficiente.

La improvisación tampoco te está dando buenos resultados.

Y los mensajes (a menudo contradictorios) que te llegan del entorno te crean confusión e inseguridad.

Si buscas comprender a tu perro, aquí te cuento cómo.

Es lógico.

Tu instinto detecta las incoherencias y contradicciones.

Pero sobre todo detecta las mentiras.

Porque mucho de lo que escuchas a diario sobre cómo debes educar o tratar a tu perro es simplemente eso, mentira.

Pero ya estás cansada de escuchar consejos y teorías incoherentes sobre cómo educar  a tu perro por parte de TODO el mundo.

Claro que también te sientes perdida con la gran cantidad de información que hay en Internet.

Y no tienes ni idea de cómo separar la paja de lo realmente valioso y útil.

Cuando mi primer perro entró en mi vida, yo estaba convencida de que todo iba a salir perfecto.

Soñaba con un animal fiel que iría siempre pegado a mis talones mientras todos a mi alrededor le admiraban y me admiraban a mí por lo bien educado que estaba.

Había leído un par de libros estupendos sobre perros, y estaba sobradamente preparada.

O eso creía yo.

¿Te imaginas lo que ocurrió?

Pues sí.

Que la realidad me dio una paliza ya desde el minuto uno.

En ese primer paso que todos los que vivimos con perros tenemos que llevar a cabo con éxito para que la convivencia no se convierta en una pesadilla.

Que sea limpio en casa.

A ser posible en una semana.

Yo hice lo que había que hacer, según mis recién adquiridos conocimientos (exclusivamente teóricos y sin gran fundamento).

Le saqué a la calle (cuando yo creí adecuado).

Le regañé cuando se hizo pis o caca en casa.

Le llevé a sus periódicos después de regañarle.

Le hice señas, se lo repetí docenas de veces al día.

Fregué y fregué y volví a fregar por todas partes.

Y seis meses después, los avances eran nulos.

Por si eso fuera poco, vivía en un piso de alquiler.

El pis y el suelo de tarima no suelen hacer una buena combinación.

Ah, y el piso era compartido con otras tres personas más.

A las que lo mismo lo de pisar según qué cosas cuando iban con prisas por las mañanas no les hacía demasiada gracia.

Así que un extra de presión para mí.

Presión que le transmitía por todos los medios posibles a mi perro.

Pero me dio igual, nada servía.

De hecho a veces parecía retroceder, y en la calle hacía menos que en casa.

Cuando visitaba a mis padres, lo mismo.

Y no, tampoco se ponían muy contentos, la verdad.

Y por más que investigaba o preguntaba a todo el que tuviera perro, no lograba nada diferente a lo que ya estaba haciendo.

“Ya aprenderá”, era la respuesta habitual al explicar que regañarle, sacarle muchas horas a la calle o darle en el hocico no funcionaba.

Pero igual con ocho meses las excusas para no aprender a ser limpio se habían agotado.

Y mi paciencia y las de quienes me rodeaban, también.

 

 

Si te interesa esto:

⇒ Ahorrar el tiempo que dedicas a dar vueltas por  Internet calentándote la cabeza con datos y más datos contradictorios para dedicarlo a algo más productivo.

 

⇒ Sentirte más tranquila y acompañada cada día gracias a un asesoramiento personalizado y profesional de tus dudas sobre comportamiento canino.

 

⇒ Olvidarte de la inseguridad y las situaciones incómodas,  y de tener que ceder a la presión social frente a los machos alfa del parque de perros que siempre te dicen lo que tienes que hacer (aunque no les hayas preguntado).

 

⇒ Dedicarle todo tu tiempo a quien de verdad importa: tu perro.

En la Consultoria online consigues respuestas personalizadas vía e-mail para esas dudas cotidianas que te rondan por la cabeza y que no tienes claro cómo resolver.

¿De qué va esto exactamente?

¿Qué puedo aprender?

Depende de lo que preguntes, la verdad.

Cuanto más preguntas, más aprendes.

Y lo mismo preguntarle a alguien con experiencia y conocimiento es mejor que escuchar al Tonto Alfa de turno alardear de su ignorancia en el parque canino.

Algunas ideas que puedes sacar en claro si realizas las preguntas que te rondan por la cabeza:

 

⇒ Para entender porqué tu perro se hace de rogar cuando le pones el arnés no hace falta jugar a las adivinanzas.

 

⇒ Cómo ahorrar tiempo y no desesperarte filtrando la información de los 237.426 resultados que da Google a tus preguntas sobre comportamiento canino.

 

⇒ Aquí tienes una manera elegante de entender las indicaciones de tu veterinario sin tener que pasar corte preguntándole a él.

 

⇒ Cómo puedes saber si a tu perro le supera el estrés sin tener que hacer un curso ni  leer un libro de 300 páginas.

 

⇒ Ya puedes dejar de agobiarte por los cientos de consejos contradictorios que recibes de absolutamente todo el mundo sobre cómo educar a tu perro.

 

⇒ ¿Y si resulta que la respuesta a una pregunta tan simple como “qué alimento es mejor para mi perro” supone un gran cambio en vuestra vida? A algunos de mis clientes les ha pasado.

 

⇒Aquí hasta en Forocoches hablan de perros ¿Sabes por qué? Porque opinar es gratis. Con este servicio te aseguras de que la respuesta que recibes tiene fundamento y no es una mera opinión.

 

⇒ Para saber cuál es el mejor material de paseo para tu perro vas a tener que preguntarle al especialista (y no soy yo, pero puedo hacer de traductor).

 

⇒ ¿Por qué seguir perdiendo el tiempo y provocarte una jaqueca preguntando tus dudas en el pipican, la tienda de animales, FB y el foro de fans de CM? Esto es más rápido y mucho más fiable.

 

⇒ Una sencilla observación sobre un arnés podría cambiar radicalmente el modo en que te relacionas con tu perro. Pero para eso tienes que preguntar en el sitio correcto.

 

⇒ Cuatro razones por las que ver la Tv durante horas no te servirá para resolver tus dudas sobre comportamiento canino.

 

⇒ La principal razón por la que tirarle la pelota a tu perro para que se canse es tan eficaz como apagar un incendio con gasolina. 

 

Te quitas un peso de encima y dejas de perder el tiempo en el parque canino

 

Por menos de lo que cuesta una comida familiar en un McDonald dispones de asesoramiento profesional y personalizado para resolver tus dudas sobre la conducta de tu mejor amigo.

Ahora en  lugar de escuchar la chapa del Tonto Alfa de turno puedes darle las gracias, sonreir con seguridad y dejarle con la palabra en la boca.

30 €/mes

(Pago 100 % seguro en plataforma externa Stripe o Paypal)

¿Cómo funciona exactamente?

Es muy sencillo.

Cuando le des al botón de suscripción, el sistema te enviará a Stripe, que es una pasarela de pago seguro externa a esta web.

Stripe se ocupará de gestionar el pago cada mes de modo automático: ojo, estás autorizando a domiciliar un pago mensual. Si deseas darte de baja en cualquier  momento, solo tienes que solicitármelo antes del nuevo cobro, y te tramito la baja al instante. 

Una vez aceptado el pago, serás redireccionada a una página donde tienes la dirección de mail para hacer tus consultas.

Realiza tu consulta a ese e-mail, planteando una duda por cada correo.

Recbirás la respuesta en un máximo de 24 horas, de lunes a viernes (excepto festivos).

Y puedes realizar tantas preguntas al mes como desees. No hay límite.

Si algo a nivel técnico no funciona correctamente, no dudes en avisarme. El sistema está automatizado y ocasionalmente falla por incompatibilidades entre navegadores, sistemas operativos y demás peplas de las que no tienens por qué saber nada.

 

¿Las dudas solo serían sobre comportamiento canino?

 

En principio es la base de la consultoría.

Pero también puedes realizar consultas relativas a cuidados veterinarios y de salud de tu amigo, ya que soy veterinaria con 20 años de experiencia en clínica.

Si no te ha quedado claro lo que te explicaron en tu clínica, no te atreviste a preguntar, o simplemente se te olvidó, puedes preguntarme a mí. 

También puedo darte una segunda opinión sobre las pruebas que le hayan hecho a tu amigo.

Este servicio tiene un límite: no emito diagnósticos ni recomiendo tratamientos, ya que no he podido recoger toda la información del caso ni he podido explorar a tu perro. 

¿Puedo preguntarte cualquier cosa de comportamiento?

Por poder, puedes, claro.

Pero no me será posible responder adecuadamente a cualquier pregunta.

Hay límites.

En concreto, el límite de tiempo que puedo estar escribiendo una respuesta.

Me explico, hay cuestiones que son demasiado complejas para poder quedar claras en unas cuantas frases de un correo electrónico.

Por un lado requieren conocer mucha (pero mucha) información que no vas a incluir en la formulación de la pregunta.

Por otra, responderlas implica redactar un protocolo completo de modificación de conducta.

Y eso está disponible en el servicio de Asesoramiento, no aquí.

Por ejemplo, no estarían incluidas en este servicio las consultas complejas del tipo “mi perro ha mordido a un niño, ¿qué puedo hacer?” o “mi perro ladra a todos los demás perros y me destroza la casa cuando se queda solo, ¿cómo lo corrijo?”.

Tampoco puedo responder dudas concretas sobre lo que hace tu perro o por qué. Otro ejemplo: si preguntas «¿por qué mi perro ladra a todos los perros con los que se cruza?», es una duda demasiado concreta sobre tu perro. Si preguntas «¿por qué los perros ladran a otros perros con los que se cruzan?» si podré darte una respuesta, pues es una duda genérica sobre perros.

Como es muy posible que no tengas claro qué cuestiones puedo resolverte y cuáles no,  tú simplemente pregunta.

Si resulta que tu duda escapa la capacidad de este servicio, te lo haré saber explicándote los motivos.

Algunos ejemplos de dudas que podría resolverte

+ Tengo un perro algo nervioso, y quería adoptar otro perro, ¿será buena idea, y cómo lo hago?

 

+ Mi perro se vuelve loco jugando a la pelota, pero creo que no es bueno que se obsesione. ¿Qué otro tipo de juegos puedo ofrecerle?

 

+ ¿Qué tipo de collar/arnés es mejor para mi galgo?

 

+ ¿Cómo hago para que mi perro no se altere tanto cuando hay visitas?

+ ¿Qué alimentación sería la más adecuada para mi perro?

+ ¿Qué significan estas alteraciones que salen en el análisis que le han hecho a mi perro? En la clínica no me las han explicado.

+ ¿Por qué mi perro monta a otros perros?

+Si mi perro es agresivo, ¿castrarlo solucionará el problema?

Si contrato a finales de mes, ¿dispondré solo de unos días para preguntar?

No.

El servicio es mensual.

Por lo tanto, contratas de mes a mes, accedas el día que accedas.

O sea, si te das de alta el día 19 de un mes, tienes hasta el 19 del mes siguiente.

Sin prisas ni presiones.

Y puedes darte de baja cuando desees, claro. Si contratas el 19 y no quieres que Stripe te paso el cargo el siguiente mes, y me avisas el día 12 del mes siguiente, cancelo la suscripción, pero sigues disponiendo de los 30 días para realizar consultas.

¿Qué garantías tengo de que esto me servirá a mí?

Casi ninguna, en realidad.

La verdad es que no estás comprando una secadora.

Me gustaría que te pensaras bien si este servicio es lo que necesitas antes de comprarlo.

Siéntete libre de consultarme cualquier duda que te surja al respecto ANTES de contratarlo y te ayudaré todo lo que pueda.

Es un servicio ideado para despejarte dudas habituales sin que te llenen la cabeza de pájaros ni te machaquen con teorías de los años cincuenta o con ideas que implican abusar de tu perro en nombre de la educación. 

Pero sabiendo que las respuestas proceden de una fuente con una cierta autoridad.

Al menos con más autoridad que el tipo ese que te dice cómo debes hacer callar a tu perro mientras el suyo corre desbocado y con la lengua arrastrando tras la pelota por trigésimo cuarta vez mientras su collar estrangulador tintinea en su garganta.

Hacer callar a un perro cortándole la respiración no tiene ningún mérito y eres lo bastante inteligente como para que no necesites que nadie te aporte una idea tan pobre. 

Eso sí, el empleo de este servicio no implica ningún tipo de responsabilidad por mi parte, se trata de una información profesional meramente orientativa.

Lo que sí puedo garantizarte es:

Todas mis respuestas están enfocadas en trabajar PARA tu perro, no para tu entorno social ni para tu comodidad (aunque igualmente saldréis beneficiados).

Por lo tanto no solo no recomendaré ni sugeriré el uso de ninguna herramienta o actuación que fuerce al perro, le limite o coaccione de ninguna manera, sino que te aconsejaré encarecidamente que dejes de actuar así si ya lo estás haciendo. Lo que te escriba lo haré pensando en tu perro, no en ti. Quizá eso te moleste, pero es él quien sufrirá las consecuencias de un mal asesoramiento, así que tengo que hacerlo de ese modo.

Si confías en que a base de preguntarme te cuente los trucos para conseguir un perro 10 que deje de hacer todo aquello que te molesta o incomoda, o cómo lograr que te haga caso siempre que le llames, me temo que te sentirás decepcionada, claro.

En ese caso, mejor no lo contrates.

Es tu elección.

Pero piénsalo antes, vale?

¿Qué pasará cuando contrate el servicio?

La verdad es que es muy sencillo.

En cuanto realices el pago, recibes una dirección de email para plantear tus dudas.

Escribes a esa dirección y yo te respondo en un plazo máximo de 24 horas, de lunes a viernes (no cuentes festivos, que de vez en cuando descanso, jeje).

Envía una duda por cada mail. Así me resulta más sencillo gestionar las respuestas. No importa si tienes tres dudas el mismo día: envía tres correos, ok?

Las preguntas son ilimitadas, es decir, puedes realizar todas las que desees.

Aunque te agradecería que si tienes muchas dudas de golpe, me envíes una diaria, así no me junto con 27 preguntas en una tarde. Eso me obligaría a acostarme muy tarde para cumplir mi compromiso de responder en menos de 24 horas, y estoy mayor para trasnochar. 

Si tienes cualquier cuestión sobre este servicio, por favor, no te cortes y me consultas.

 

Además de no entender algunas conductas de mi perro, estoy algo perdida en el veterinario

 

Ya no.

Puedes incluir preguntas de salud, pedir segundas opiniones o que te traduzca al cristiano unos análisis. 

Lo mismo si no entendiste bien el tratamiento que le han mandado a tu amigo.

Porque para cuidar a tu perro de  modo integral no solo toca saber algo de conducta.

También hay que entender el asunto de su salud.

 

30 €/mes

(Pago 100 % seguro en plataforma externa Stripe o Paypal)

error: Este contenido está protegido